4 de marzo de 2015

CHIQUILLOS CONVERTIDOS EN TLACUACHES

TOMADO DE LA SEGUNDA PARTE DEL LIBRO “MIS RECUERDOS”, ESCRITO POR EL PROFR. RAFAEL MARTÍNEZ MORALES DE IXHUACÁN DE LOS REYES, SE REPRODUCE A CONTINUACIÓN LA PÁG. 27

Cualquier chagolla, es decir, cualquiermoneda fuera de circulación, una resortera,piedras, semillas, canicas, el trompo con su cuerda, un durazno mordido, clavos, soldaditos de plomo, un silbato, o la pata de una avecilla que abría y cerraba los dedos al tirarle de los tendones, fueron los objetos con los que generalmente llenábamos las bolsas del pantalón; parecíamos marsupiales cargando todo lo que para nosotros era interesante.

Presumíamos llevando estas pesadas colecciones de objetos.

Frecuentemente teníamos que escuchar los regaños que con justa razón nos daban nuestras mamás, por ser ellas quienes reponían o remendaban las bolsas del pantalón, rotas por cargar esos, nuestros valiosos tesoros.

Esos regaños incluían aquello de que: “por una oreja te entra y por otra te sale”, porque estaban seguras de que les hacíamos poco caso.

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